Allá por el año 1989 la compañía japonesa Nissan lanzaba, tras años de desarrollo, los primeros modelos de su división de coches de lujo Infiniti. El objetivo era ambicioso: competir contra las marcas líderes del sector premium, como BMW, Audi, Mercedes o Volvo. Con el paso de los años, parece que la apuesta de Nissan tenía razón de ser y paralelamente a lo conseguido por Toyota con su submarca Lexus, el tiempo les ha dado la razón. Pero, ¿por qué elegir un Infiniti?
Aunque en un principio Infiniti trató de diferenciarse a través de una estrategia comercial y de postventa más propia de los hoteles de lujo que del sector automovilístico, en la actualidad la división de Nissan compite en el mismo terreno que sus principales adversarios. Y no sólo, como cabría esperar, en cuanto a precio, sino que también en aspectos técnicos como los acabados, la optimización de los motores o las prestaciones.
Esto se ve de forma diáfana en modelos como el Infiniti Q50 2.2d que actualmente se comercializa en su edición Primer Aniversario por menos de 27 mil euros (incluyendo el plan PIVE). Con un motor de 2.2 litros de inyección (diésel) y una potencia de 170 caballos, esta berlina se convirtió rápidamente en el buque insignia de la marca en Europa y en competencia directa de vehículos consolidados como el A3 de Audi, el clase C de Mercedes o los serie 3 de BMW.
Tanto en esta versión como en su potente versión de motor híbrido (la 3.5H con 364 CV, características propias prácticamente de un deportivo de alta gama), el Q50 se destaca por la gran deportividad de sus líneas, menos “serias” que sus competidores; sus acabados cuidados y cada vez más europeos (en el sentido de hacernos sentir realmente dentro de un coche Premium) o por sus aportaciones tecnológicas, como la consola de doble pantalla táctil o el sistema Direct Adaptive Steering, una suerte de dirección asistida de nueva generación.
En la categoría de los llamados todoterrenos ligeros o SUV, también encontramos un motivo de sobra por el que elegir un Infiniti: el QX70 (ver primera foto). Y es que este enorme vehículo es un auténtico “rey de la carretera”, capaz de competir y de superar, en algunos aspectos, a rivales de la talla del BMW X5 o el Range Rover Sport. Con un precio que parte desde los 50 mil euros, el hermano mayor de la familia Infiniti entra, en primer lugar, por los ojos a través de un diseño convincente, una silueta fantástica y un interior en el que destaca la ergonomía y el confort.
Sus diferentes opciones de motor, desde el V6 hasta el V8 de 390 CV; los sistemas de seguridad incorporados (el ESP, el control monitorizado de amortiguación, las cámaras de visión perimétrica Around View Monitor o el control de crucero inteligente, que avisa si nos aproximamos a excesiva velocidad a otro vehículo) o los múltiples dispositivos de conectividad y entretenimiento hacen del QX70 un coche apto para los conductores más exigentes y sofisticados, así como una razón de peso para dar una oportunidad a un Infiniti.
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